📍 Hola, soy Govana, fundadora de Sananda Healing. Nací en Lima, Perú, pero crecí en Huacho, un lugar donde desde niña soñaba con un mundo lleno de amor, bondad y compasión. Sentía profundamente el dolor ajeno y deseaba poder aliviarlo con el amor que brotaba de mi corazón. A pesar de que no todos compartían esa sensibilidad, yo sabía que todas las personas, sin importar su historia, necesitaban lo mismo: amor.
Como muchas personas, viví experiencias que me desconectaron de mi esencia. Me mudé a Lima, trabajé como asistente dental y luego me trasladé a Nueva York, donde formé una familia con el amor de mi vida. Pero incluso cumpliendo los “sueños” que la sociedad propone, algo dentro de mí seguía buscando respuestas más profundas.
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🌍 SANAR TAMBIÉN ES AYUDAR AL PLANETA
Cuando una persona sana, el planeta también lo hace. Somos las células del cuerpo de la Tierra: si sanamos, vibramos más alto, y ayudamos al planeta en su proceso de ascensión a la 5D. Todo empieza por uno mismo. La paz, la abundancia, el amor… no están fuera. Están dentro de ti.
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TERAPIAS CON AMOR
Mis terapias combinan herramientas como la radiestesia, Reiki, coaching de vida y el uso del péndulo. Pero más allá de la técnica, lo que guía cada sesión es mi intención profunda de sanar con amor, como lo hacía el Maestro Jesús, también conocido como Sananda en el plano metafísico.
Sananda nos enseñó que todos tenemos el poder de sanar, y que estamos aquí para recordar esa verdad. Yo no creo en los dogmas, ni en el juicio. Creo en el alma, en la energía, en el amor incondicional.
💬 ¿QUÉ PUEDES ESPERAR DE UNA SESIÓN?
Escuchar lo que tu alma quiere decirte
Identificar emociones no sanadas y cómo impactan tu cuerpo físico
Romper creencias limitantes que bloquean tu abundancia
Reconectar con tu poder creador
Recordar que tú tienes el control de tu vida
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🌟 UNA INVITACIÓN
Si sientes que es momento de despertar, de transformar tu vida, de vivir con más paz, propósito y amor… estoy aquí para acompañarte. No porque tenga todas las respuestas, sino porque he transitado ese camino, y sé que sí se puede.